22 años y friki desde que una Nintendo 64 entró en casa las navidades de 1998. Las barbies pasaron a un segundo plano y, unos años más tarde, probaba FINAL FANTASY VIII para no volver a soltar un RPG. Desde entonces, y cuando tuve cierta edad para andar campando a mis anchas por internet, siempre me ha gustado mucho compartir contenidos de la saga. La extinta Final Fantasy Zone Xtreme, Base Avalancha y La Capital Olvidada son algunos de los sitios donde, junto a grandes fans, pasé muchas horas debatiendo y ahondando en los aspectos que hacen a esta saga tener tantos seguidores.
El aburrimiento —y el afán por compartir contenidos, secundariamente— me llevaron a iniciar esta web en abril de 2009, cuando se empezaban a conocer cada vez más novedades de FINAL FANTASY XIII, que saldría ese año en Japón. La compilación FABULA NOVA CRYSTALLIS, con varios títulos en su haber, me garantizaría muchas horas entretenida frente al ordenador. Posteriormente, se me ocurrió realizar una guía del juego y, quizá ahí, descubrí que me gustaba mucho escribir, y lo realmente cómodo que es cuando el contenido interesa a uno mismo.
Es posible que este sitio fuera el motivo de que, años más tarde, decidiera estudiar Comunicación Audiovisual en la universidad e intentar centrar mi futuro en el ámbito de los videojuegos. También me gustan mucho los caballos, y podría ser igualmente feliz en una granja cuidando de ellos. Pero, al caso: otras de mis sagas favoritas son The Legend of Zelda, Pokémon, Soulcalibur, Dragon Quest y asesinar sims en Los Sims organizando una fiesta con alfombras para provocar después un incendio; el clásico de la piscina ya está muy visto.
En 2013, tuve la oportunidad de visitar Japón y se despertó en mí un interés por el idioma, que comencé a estudiar tiempo después. Actualmente, he terminado la carrera y me preparo para intentar hacer algo interesante con mi vida.
Gracias a esta página, que pretendía ser una mera fuente de entretenimiento, he conocido a muchas personas y guardo en mi memoria grandes experiencias: un motivo más para estar siempre agradecida a FINAL FANTASY.